Desde sus inicios en 1968, Madeplax ha evolucionado desde la comercialización de productos de carpintería hasta convertirse en un referente global en madera, aluminio, vidrio y acero. Adaptándose a los cambios del mercado, el Grupo ha diversificado sus servicios, expandiendo operaciones a nivel internacional y estableciendo delegaciones en Europa, América y África.
Con un enfoque constante en la calidad, sostenibilidad e innovación, Madeplax ha forjado alianzas estratégicas, desarrollado productos exclusivos y creado infraestructuras como Plaza 3 Center en República Dominicana, un centro clave para el Caribe. Hoy en día, el Grupo continúa creciendo, impulsando proyectos en mercados emergentes, fortaleciendo su presencia global y garantizando soluciones integrales a sus clientes.
Más de 50 años ofreciendo soluciones de carpintería a nivel global.
El grupo inició su actividad comercializando productos de carpintería, estableciendo inicialmente unas pocas rutas comerciales que fueron ampliándose con el tiempo. Para responder mejor a la demanda en términos de modelos, calidad y plazos de entrega, decidieron involucrarse en la fabricación de sus propios productos. Así, crearon su propia fábrica y comenzaron a producir puertas lisas y especiales por encargo, alcanzando una capacidad de 1.000 puertas diarias con un equipo comprometido.
Este crecimiento los llevó a buscar proveedores de materias primas fuera de sus fronteras. Con el apoyo de las Cámaras de Comercio y financiamiento del Banco de Monrovia, expandieron su actividad en Liberia y realizaron estudios en Centro y Sudamérica, así como en Asia, para identificar los mejores mercados de suministro y manufactura de madera. Ante las previsiones de crecimiento, establecieron sus primeras delegaciones en Manresa, Madrid y Málaga.
Expandiendo su negocio, comenzaron a trabajar en el sector de la construcción e incorporaron el servicio de instalación, lo que les permitió fortalecer su presencia en el mercado. Este nuevo enfoque les abrió oportunidades con proveedores internacionales y clientes de mayor envergadura. Sin embargo, la crisis económica de finales de los años 70 y principios de los 80 los obligó a reducir su expansión y concentrarse en el mercado nacional, operando principalmente en Valencia, Baleares y Portugal.
Aprovechando su experiencia en importación y fabricación, fundaron Alcama, una empresa que pronto se convirtió en la mayor importadora de madera en Valencia, abasteciendo a carpinterías y sectores afines. Fortalecieron relaciones con proveedores africanos, promoviendo la tala responsable y la sostenibilidad. Diversificaron la importación para satisfacer la demanda europea y lograron tal volumen de comercio en maderas americanas que ganaron reconocimiento internacional. Este éxito atrajo la atención de empresas de EE.UU. y Canadá, con las que establecieron alianzas estratégicas que impulsaron aún más su crecimiento.
Expandieron su presencia global con viajes a países productores de madera y visitas constantes al Caribe, especialmente República Dominicana y México. Detectaron una creciente demanda de carpintería en madera, aluminio y vidrio por parte de las cadenas hoteleras internacionales. Para atender este mercado, comenzaron a ofrecer estos nuevos materiales y desarrollaron un trabajo riguroso de I+D+i para crear productos innovadores.
Abrieron delegaciones en Ibiza y Huelva-Portugal, así como en Bávaro (República Dominicana), Quintana Roo (México) y Montego Bay (Jamaica). Implementaron talleres móviles en el Caribe con capacidad para realizar instalaciones en cualquier parte del mundo. Impulsaron la Feria de Ferretería del Sector de la Madera y abrieron una exposición permanente en su sede central en L’Alcúdia.
Ampliaron operaciones en mercados emergentes como Argelia, Marruecos y Brasil. Su crecimiento llevó a la independencia de varias divisiones, como laca, ferretería, chapa y molduras. En 2007 pre-inauguraron los primeros 9.000 m² de Plaza 3 Center en Bávaro, un complejo industrial y comercial de más de 35.000 m² para mejorar el servicio en el Caribe. Finalmente, en 2008 se completó el proyecto con un área comercial y la mejora de infraestructuras clave en la zona.
Con el inicio de la crisis, el Grupo Madeplax continuó su expansión en regiones menos afectadas, como el Caribe y Marruecos, consolidando nuevas delegaciones y alianzas estratégicas con fábricas en España, Brasil, Estados Unidos y Asia. Estas alianzas les permitieron cubrir la demanda de productos y crear alternativas económicas y funcionales.
Su presencia en África, especialmente en Argelia, se acrecentó, lo que les permitió una mayor flexibilidad para servir a sus clientes. Las principales cadenas hoteleras del Caribe siguieron confiando en Madeplax, extendiendo su mercado a países como Costa Rica.
Mejoraron la infraestructura de Plaza Tres Center y comenzaron a proyectar un nuevo Complejo Industrial Comercial en Bávaro, destinado a convertirse en un centro logístico y financiero. Asimismo, apostaron por el mercado asiático para desarrollar nuevas ideas y crearon una empresa dedicada a la búsqueda de productos innovadores, cerrando alianzas estratégicas con fabricantes de la región. Esta expansión permitió ofrecer productos novedosos, ampliando su gama y beneficiando tanto a proveedores como a clientes.
El grupo inició su actividad comercializando productos de carpintería, estableciendo inicialmente unas pocas rutas comerciales que fueron ampliándose con el tiempo. Para responder mejor a la demanda en términos de modelos, calidad y plazos de entrega, decidieron involucrarse en la fabricación de sus propios productos. Así, crearon su propia fábrica y comenzaron a producir puertas lisas y especiales por encargo, alcanzando una capacidad de 1.000 puertas diarias con un equipo comprometido.
Este crecimiento los llevó a buscar proveedores de materias primas fuera de sus fronteras. Con el apoyo de las Cámaras de Comercio y financiamiento del Banco de Monrovia, expandieron su actividad en Liberia y realizaron estudios en Centro y Sudamérica, así como en Asia, para identificar los mejores mercados de suministro y manufactura de madera. Ante las previsiones de crecimiento, establecieron sus primeras delegaciones en Manresa, Madrid y Málaga.
Expandiendo su negocio, comenzaron a trabajar en el sector de la construcción e incorporaron el servicio de instalación, lo que les permitió fortalecer su presencia en el mercado. Este nuevo enfoque les abrió oportunidades con proveedores internacionales y clientes de mayor envergadura. Sin embargo, la crisis económica de finales de los años 70 y principios de los 80 los obligó a reducir su expansión y concentrarse en el mercado nacional, operando principalmente en Valencia, Baleares y Portugal.
Aprovechando su experiencia en importación y fabricación, fundaron Alcama, una empresa que pronto se convirtió en la mayor importadora de madera en Valencia, abasteciendo a carpinterías y sectores afines. Fortalecieron relaciones con proveedores africanos, promoviendo la tala responsable y la sostenibilidad. Diversificaron la importación para satisfacer la demanda europea y lograron tal volumen de comercio en maderas americanas que ganaron reconocimiento internacional. Este éxito atrajo la atención de empresas de EE.UU. y Canadá, con las que establecieron alianzas estratégicas que impulsaron aún más su crecimiento.
Expandieron su presencia global con viajes a países productores de madera y visitas constantes al Caribe, especialmente República Dominicana y México. Detectaron una creciente demanda de carpintería en madera, aluminio y vidrio por parte de las cadenas hoteleras internacionales. Para atender este mercado, comenzaron a ofrecer estos nuevos materiales y desarrollaron un trabajo riguroso de I+D+i para crear productos innovadores.
Abrieron delegaciones en Ibiza y Huelva-Portugal, así como en Bávaro (República Dominicana), Quintana Roo (México) y Montego Bay (Jamaica). Implementaron talleres móviles en el Caribe con capacidad para realizar instalaciones en cualquier parte del mundo. Impulsaron la Feria de Ferretería del Sector de la Madera y abrieron una exposición permanente en su sede central en L’Alcúdia.
Ampliaron operaciones en mercados emergentes como Argelia, Marruecos y Brasil. Su crecimiento llevó a la independencia de varias divisiones, como laca, ferretería, chapa y molduras. En 2007 pre-inauguraron los primeros 9.000 m² de Plaza 3 Center en Bávaro, un complejo industrial y comercial de más de 35.000 m² para mejorar el servicio en el Caribe. Finalmente, en 2008 se completó el proyecto con un área comercial y la mejora de infraestructuras clave en la zona.
Con el inicio de la crisis, el Grupo Madeplax continuó su expansión en regiones menos afectadas, como el Caribe y Marruecos, consolidando nuevas delegaciones y alianzas estratégicas con fábricas en España, Brasil, Estados Unidos y Asia. Estas alianzas les permitieron cubrir la demanda de productos y crear alternativas económicas y funcionales.
Su presencia en África, especialmente en Argelia, se acrecentó, lo que les permitió una mayor flexibilidad para servir a sus clientes. Las principales cadenas hoteleras del Caribe siguieron confiando en Madeplax, extendiendo su mercado a países como Costa Rica.
Mejoraron la infraestructura de Plaza Tres Center y comenzaron a proyectar un nuevo Complejo Industrial Comercial en Bávaro, destinado a convertirse en un centro logístico y financiero. Asimismo, apostaron por el mercado asiático para desarrollar nuevas ideas y crearon una empresa dedicada a la búsqueda de productos innovadores, cerrando alianzas estratégicas con fabricantes de la región. Esta expansión permitió ofrecer productos novedosos, ampliando su gama y beneficiando tanto a proveedores como a clientes.